El ahogamiento es un grave problema de seguridad pública. Deseamos ofrecer consejos a todos los padres para mantener su seguridad en y alrededor del agua: NUNCA dejes solo a un niño cuando haya agua alrededor. No importa si ha tomado clases en ENAI o en cualquier otro lugar.
¡NADIE ESTÁ EXENTO AL AHOGAMIENTO!
Evita usar flotadores de cualquier tipo; dan un falso sentido de seguridad. Acostumbrados a flotar con ellos, cuando se los quitas, los niños brincan al agua y no saben cómo responder. También crean hábitos de nado vertical y con la cabeza fuera del agua. Esto causará retraso en el aprendizaje para nadar horizontalmente y con la cabeza dentro del agua.
Las clases de natación deben ser sólo una de las muchas medidas de precaución.
Si tienes alberca en tu casa:
- Aprende y enseña a tus hijos a nadar.
- Aprende RCP.
- Ten una reja alrededor de la alberca de al menos 60 pulgadas de altura.
- La puerta hacia la alberca debe estar siempre cerrada.
- La puerta hacia la alberca debe abrirse jalándose hacia la persona para que el niño no pueda empujarla, evitando así que el niño entre al área de la alberca.
- La puerta debe tener un resorte que cierre sola.
- El candado de la puerta debe estar a una altura inalcanzable para los niños.
- Instala una alarma que avise cuando se abra la puerta.
- Instala una red sobre el agua.
- Debe haber un salvavidas (anillo o tabla) instalado cerca que no sea para juego sino para uso en caso de emergencias.
- Saque de la alberca todos los juguetes al finalizar al día para evitar llamar la atención del niño.
- Ten un teléfono siempre disponible para emergencias, y los números de emergencia a la mano.
- Nunca nades solo.
Consejos en caso de eventos sociales en alberca
- Asigne a un adulto como observador. Pueden ser dos adultos y tomar turnos. Esta persona tendrá la responsabilidad de estar 100% atenta a la alberca. Debe contar el número de personas en el agua constantemente.
- Evite clavados, brincos, empujones y otros juegos bruscos.